Cómo se forma la placenta
El embarazo: Diagnóstico, fisiología y cuidados, el desarrollo y el crecimiento del feto son sostenidos completamente por la madre hasta el nacimiento. La placenta está formada por un lado fetal y otro materno, y proporciona un sistema vascular.
Las células humanas dependen principalmente del metabolismo aeróbico. El sistema respiratorio participa en la ventilación pulmonar y la respiración externa, mientras que el sistema circulatorio es responsable del transporte y la respiración interna. La ventilación pulmonar (respiración) representa el movimiento de entrada y salida de aire de los pulmones. La respiración externa, o intercambio de gases, está representada por el intercambio de O2 y CO2 entre los pulmones y la sangre.
Las células humanas dependen principalmente del metabolismo aeróbico. El sistema respiratorio participa en la ventilación pulmonar y la respiración externa, mientras que el sistema circulatorio es responsable del transporte y la respiración interna. La ventilación pulmonar (respiración) representa el movimiento de entrada y salida de aire de los pulmones. La respiración externa, o intercambio de gases, está representada por el intercambio de O2 y CO2 entre los pulmones y la sangre.
Función de la placenta
Una de las muchas cosas destacables del embarazo es que no sólo está creciendo un nuevo ser humano, sino también un órgano completamente nuevo. Por él pasa prácticamente todo lo que el bebé necesita para desarrollarse y prosperar. Descubre todo lo que hay que saber sobre la increíble placenta, incluyendo cuándo se forma y qué hace.
Las vellosidades también actúan como un filtro, impidiendo que algunos virus y bacterias lleguen a tu bebé, a la vez que permiten que pasen las moléculas de todo lo que ingieres, así como los anticuerpos y los gases. ¿Cómo obtienen los bebés los nutrientes en el útero? Tu bebé necesita alimentarse desde el principio. Hasta que la placenta se desarrolle lo suficiente como para proporcionarle nutrientes, el bebé los recibe del revestimiento del útero, llamado endometrio. (Estas mismas células endometriales se multiplicarán rápidamente para formar la placenta.)En las primeras semanas de embarazo, las glándulas del revestimiento uterino segregan glucosa, que almacena en forma de glucógeno. Al principio, este glucógeno es la única fuente de alimento para el bebé. Entre las 8 y las 12 semanas de embarazo, la placenta toma el relevo como fuente de nutrientes para el bebé (y en ese momento el útero deja de segregar glucógeno). Depende de la rapidez con la que se digieren los alimentos y entran en el torrente sanguíneo. Algunos alimentos pueden tardar varias horas, mientras que sustancias como la cafeína pueden entrar en el torrente sanguíneo y atravesar la placenta en muy poco tiempo. Para más información, mira nuestro vídeo sobre cómo llegan los alimentos a tu bebé.
Función del cordón umbilical
El cordón umbilical es la conexión vital entre el feto y la placenta. El desarrollo del cordón umbilical comienza en el periodo embrionario alrededor de la tercera semana con la formación del tallo conector. En la semana 7, el cordón umbilical se ha formado completamente, y está compuesto por el tallo conector, el conducto vitelino y los vasos umbilicales que rodean la membrana amniótica. Los vasos umbilicales transportan la sangre del feto hacia la placenta, la vena umbilical transporta la sangre oxigenada con nutrientes de la placenta al feto y las arterias umbilicales transportan la sangre desoxigenada con productos de desecho del feto a la placenta. Las estructuras embrionarias retroceden hacia el final del primer trimestre, dejando el cordón umbilical compuesto por dos arterias umbilicales y una vena umbilical rodeadas por una matriz extracelular similar a la gelatina conocida como gelatina de Wharton. El alargamiento del cordón umbilical se produce principalmente en el segundo trimestre. El cordón umbilical medio tiene entre 50 y 60 centímetros de longitud, 2 centímetros de diámetro y hasta 40 vueltas helicoidales. Las anomalías del cordón umbilical pueden provocar un aumento de la morbilidad y la mortalidad del feto.
Cuáles son los componentes de la placenta
La placenta y el corazón del feto son dos de los primeros órganos en diferenciarse, por lo que se supone que su desarrollo está interrelacionado. Genes y micronutrientes comunes, como el folato, regulan pasos esenciales en la formación de ambos órganos, por lo que frecuentemente coexisten anomalías cardíacas y placentarias (Linask, 2013). Sin embargo, cada vez hay más pruebas de que los defectos primarios en el desarrollo de la placenta pueden influir en el desarrollo del corazón del feto y su función después del parto.
Conceptualmente, la influencia de la placenta puede ser doble. En primer lugar, la eficacia de la placenta como fuente de oxígeno y nutrientes, y como barrera selectiva a los xenobióticos, puede tener un profundo impacto en la morfogénesis y la capacidad funcional de muchos sistemas de órganos a través de la programación del desarrollo (Burton et al., 2016). En segundo lugar, a pesar de la falta de datos experimentales, es muy probable que la hemodinámica de la circulación umbilicoplacentaria influya en el desarrollo cardíaco del feto (Linask et al., 2014). La placenta es el mayor de los órganos fetales y, a término, recibe aproximadamente el 40% del gasto cardíaco fetal. La resistencia ofrecida por la red arterial y capilar dentro de los árboles vellosos de la placenta variará según la etapa de desarrollo y la presencia de patología placentaria. Dado que la expresión génica cardíaca es muy sensible a las señales biomecánicas, esa resistencia puede influir en la diferenciación de los cardiomiocitos y en la morfogénesis del corazón (Hove et al., 2003; Kowalski et al., 2014).