La formacion de al andalus

Ciclo de conferencias Luis Martín de Humanidades

Estos dos volúmenes presentan un compendio de las investigaciones actuales sobre la historia y la cultura de la España y el Portugal altomedievales, desde la conquista árabe en 711 hasta la caída del califato. Analizan el impacto de la islamización en las estructuras políticas y sociales romanas y visigodas preexistentes, la continua interacción entre cristianos y musulmanes, y describen el desarrollo y las características particulares de la España musulmana – al-Andalus. En conjunto, comprenden 38 artículos, de los cuales 32 han sido traducidos al inglés especialmente para esta publicación. El primer volumen se centra en la historia política y social, y examina con detalle las pautas de asentamiento y urbanización; el segundo examina cuestiones lingüísticas y abarca la brillante historia cultural e intelectual del periodo.

Al Andalus – الأندلس

Tras la conquista omeya del reino cristiano visigodo de Hispania, al-Andalus, entonces en su máxima extensión, se dividió en cinco unidades administrativas, que correspondían aproximadamente a la actual Andalucía; Castilla y León; Navarra, Aragón, Cataluña; Portugal y Galicia; y la zona Languedoc-Rosellón de Occitania. [11] Como dominio político, constituyó sucesivamente una provincia del califato omeya, iniciado por el califa al-Walid I (711-750); el emirato de Córdoba (c. 750-929); el Califato de Córdoba (929-1031); los reinos de taifas (sucesores) del Califato de Córdoba (1009-1110); el Imperio Almorávide Sanhaja Amazigh (1085-1145); el segundo periodo de taifas (1140-1203); el califato almohade masmuda amazigh (1147-1238); el tercer periodo de taifas (1232-1287); y, por último, el emirato nazarí de Granada (1238-1492).

Cristianos y judíos estaban sujetos a un impuesto especial, llamado jizya, para el Estado, que a cambio les proporcionaba autonomía interna en la práctica de su religión y les ofrecía el mismo nivel de protección por parte de los gobernantes musulmanes. Pero la jizya no era sólo un impuesto, sino también una expresión simbólica de subordinación, según el orientalista Bernard Lewis[13].

D1S5 Ramón Grosfoguel: De la Conquista de Al Andalus al

Eduardo Manzano Moreno es Profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en Madrid y British Academy Global Professor en la Universidad de St. Andrews. Entre 2007 y 2012 fue Director del Centro de Ciencias Sociales y Humanas del CSIC Ha sido profesor visitante en las universidades de Oxford (St. John’s College), Chicago (Tinker Professor) y la School of Oriental and African Studies. Sus investigaciones se han centrado en la historia de al-Andalus y en las implicaciones políticas de la memoria histórica. Ha dirigido numerosos proyectos de investigación centrados en ambos temas, sobre los que también ha publicado un gran número de artículos y capítulos de libros en publicaciones inglesas, francesas y alemanas. Entre sus obras anteriores figuran Conquistadores, emires y califas. Los omeyas y la formación de al-Andalus (Editorial Crítica) y Épocas Medievales (Editorial Crítica).

Cortometraje documental en urdu: Historia del Islam en España – Al Andalus

3Para la historiografía española de los siglos XVI-XVII, al-Andalus era una cuestión contradictoria. Por un lado, su huella se encontraba por todas partes -en la lengua, los monumentos, las huellas del pasado-; pero al mismo tiempo esa misma presencia acentuaba (como en el caso de los moriscos) la espinosa cuestión de la religión. Este artículo pretende mostrar que, más allá del gran relato de la «Reconquista» (en el que al-Andalus formaba parte de la historia de España a través de la lógica de un enfrentamiento militar providencial), este aspecto contradictorio persistía en la historiografía del periodo aquí considerado, que se debatía entre la apropiación de la herencia andalusí, cuyo valor era frecuentemente reconocido, y su rechazo de la religión musulmana. Esta contradicción propició cierta persistencia del aprendizaje del árabe (hasta entonces poco tratado en la historiografía) y también un planteamiento problemático de la cuestión de la continuidad y la fractura de una «identidad española» a través de la Edad Media andalusí, que emerge en campos como la historia religiosa, la arqueología, la genealogía, etc.