Tipo de educación
Las actividades in situ ofrecen la oportunidad de profundizar en un tema. La enseñanza suele incluir estudios de casos y se anima a los participantes a compartir las mejores prácticas. Desde 2019 CEPOL ofrece simulaciones en sus formaciones.
La actividad de formación presencial es una reunión física de participantes y formadores durante un número determinado de días con el fin de transferir conocimientos, experiencia y habilidades entre formadores y participantes, facilitada por el organizador, que está representado por el director de la actividad. El término «residencial» se refiere al hecho de que se requiere un lugar físico.
Organizador de la actividad de formación in situ: La propia CEPOL o un socio marco de un Estado miembro1, responsable de preparar todos los aspectos de una actividad de formación in situ, que abarcan el contenido, la planificación presupuestaria, la ejecución y la logística, siguiendo el calendario de las actividades de formación in situ. El organizador es libre de organizar el trabajo respectivo según sea necesario, disponiendo de un director de actividad y de personal destinado a ayudar en la organización del contenido y/o la logística.
Tipos de entrenamiento físico
La formación inicial y la formación continua tienen un papel fundamental en el mantenimiento de los cambios radicales que se están produciendo en nuestras sociedades. No sólo contribuyen a reducir la desigualdad y la vulnerabilidad, sino que fomentan las oportunidades necesarias para la emancipación, la movilidad y la integración social, cívica y económica de todos los hombres y mujeres.
En Togo, por ejemplo, estamos apoyando la puesta en marcha de reformas en la escuela media para mejorar el acceso a la educación y la calidad de la misma: el proyecto PAREC está mejorando sustancialmente las condiciones de aprendizaje de los alumnos de secundaria y realizando una importante labor de concienciación para ayudar a las niñas a acceder a la escuela media y mantenerlas en ella.
Por último, promovemos industrias y sectores competitivos motivados por la responsabilidad social. Por ejemplo, apoyamos la Red Africana de Centros de Excelencia en Electricidad, en la que el potencial de las energías renovables y el papel de las redes inteligentes desempeñan un gran papel.
Por último, apoyamos la continuidad entre la enseñanza superior, la investigación, la innovación y el espíritu empresarial. Apoyamos los sistemas de investigación nacionales y regionales mediante el desarrollo de la capacidad de los equipos de investigación y la mejora de las condiciones materiales de las instituciones y laboratorios de investigación. Para ello, financiamos los Centros de Excelencia de la Enseñanza Superior Africana junto con el Banco Mundial. El programa apoya 44 centros basados en universidades o escuelas en sectores estratégicos: salud, digital, agricultura, transporte, agua y energía.
Tipos de formación
Las personas están aprendiendo constantemente en todas partes y en todo momento. No pasa un solo día sin que todos los individuos adquieran habilidades, conocimientos y/o competencias adicionales. Para las personas que están fuera del sistema de educación y formación inicial, los adultos en particular, es muy probable que este aprendizaje, que tiene lugar en el hogar, en el lugar de trabajo o en cualquier otro sitio, sea mucho más importante, relevante y significativo que el tipo de aprendizaje que se produce en entornos formales.
El supuesto que subyace al trabajo que aquí se expone es que todo el aprendizaje tiene valor y que la mayor parte de él merece ser visibilizado y reconocido. Es una clara opción posible, y una alternativa plausible a la educación y la formación formales, hacer que se evalúe el aprendizaje no formal e informal. La verdadera cuestión es saber en qué condiciones el aprendizaje no reconocido puede codificarse y dar lugar a la concesión de un documento. Hay cuestiones de coste y motivación de los individuos que son algo difíciles de abordar.
El reconocimiento del aprendizaje no formal e informal es un medio importante para hacer realidad la agenda del «aprendizaje permanente para todos» y, posteriormente, para remodelar el aprendizaje para que se adapte mejor a las necesidades de las economías del conocimiento y las sociedades abiertas del siglo XXI.
Otros tipos de educación
De izquierda a derecha, desde arriba: Conferencia en la Facultad de Ingeniería Biomédica de la Universidad Técnica Checa, en Praga (República Checa); Escolares sentados a la sombra de un huerto en Bamozai, cerca de Gardez, provincia de Paktia (Afganistán); Estudiantes participantes en la competición de robótica FIRST, en Washington, D.C.; Educación infantil a través de USAID en Ziway (Etiopía).
La educación es una actividad orientada a la consecución de determinados objetivos, como la transmisión de conocimientos o el fomento de habilidades y rasgos de carácter. Estos objetivos pueden incluir el desarrollo de la comprensión, la racionalidad, la bondad y la honestidad. Varios investigadores destacan el papel del pensamiento crítico para distinguir la educación del adoctrinamiento. Algunos teóricos exigen que la educación tenga como resultado una mejora del estudiante, mientras que otros prefieren una definición neutral de valores del término. En un sentido ligeramente diferente, la educación también puede referirse, no al proceso, sino al producto de este proceso: los estados mentales y las disposiciones que poseen las personas educadas. La educación se originó como la transmisión del patrimonio cultural de una generación a otra. Hoy en día, los objetivos de la educación abarcan cada vez más nuevas ideas, como la liberación de los alumnos, las habilidades necesarias para la sociedad moderna, la empatía y las habilidades profesionales complejas.